Teniamos ganas de volver a visitar Catedral de Burgos de nuevo, porque la recordabamos oscura, negra... ¡increible como ha cambiado! está impecable, limpia... ¡¡preciosa!! con las audio guías fuimos haciendo la visita y es un gran acierto porque te vas enterando de todo y fijando en cosas que de otra manera posiblemente pasarías por alto.
Nos encantó, disfrutamos muchísimo con la visita, cien por cien recomendable a todo el mundo, merece muchísimo la pena.
Anina.