Hoy nos ha dejado Carmen, compañera de mi abuela Angustias en su estancia en el hospital, en el que tantos días pasamos juntas.
Imposible no cogerle cariño, tanto a ella, que inspiraba tanta ternura, como a su familia: Maruchi y Germán, que tan bien nos trataron, y a los que estoy muy agradecida.
Querida Carmen, hasta siempre,
Anina