Con las acampadas surgidas en torno al 15M a muchos se nos ha reabierto la memoria de la esperanza, porque lo que se ha cultivado mayoritariamente en las últimas décadas es la mata más dañina que nos pudieron inocular a cuenta del mamoneo corrupto de la partitocracia entre el PP y el PSOE, y esa mata es la del escepticismo desesperado.
Y es que a cuenta de establecerse como tradición inamovible en nuestros gobiernos el baile continuo entre esas dos siglas como hacedoras del universo “democrático”, las personas con ánimo de lucha y de transformación nos acabamos convirtiendo en sesteantes eternos y desesperados de una realidad que no queremos para nosotros ni para nuestro futuro, pero que se ha planteado hasta ahora como algo tan inamovible como lo es el mar.
Después de volver a tomar oxígeno a la superficie tras décadas de ahogo, los resultados electorales tan abrumadores del color azul de sus antiguas camisas, se plantean como el mayor jarro de agua fría posible para esta lucha pacífica que ha hecho estos días de La Puerta del Sol el epicentro de una nueva esperanza consensuada, ciudadana, y con el mejor criterio y voluntad política que hemos tenido en este país desde que franco estiró la pata, pero es que es ahora cuando debemos encontrar la capacidad de maniobra para perpetuar y reforzar esta posición ciudadana, y reflexionar hacia dónde nos encaminamos con unas elecciones generales a la “vuelta de la esquina”.
Con esos resultados obtenidos parece como que los ciudadanos indignados en realidad fuéramos cuatro gatos pataleando una rabieta sin fundamento. Ya les veo a todos los corruptos vencedores frotándose las manos como frailes perversos pensando que ahora sí que se van a poder seguir poniendo hasta las trancas sin cortapisa. Y la verdad es que uno se pregunta a la luz de los acontecimientos dónde coño está la conciencia moral de este país que con su voto fortalece la admirada cultura del pelotazo.
Desde luego que es este país tan estrepitoso y colorista uno de los mayores y mejores exportadores de ceguera y sordera que en el mundo han sido, pero como he dicho antes, debemos hacer que el espíritu de Sol siga trabajando por el futuro, por lo que se ha planteado una acción pacífica y legal contra los bancos y los especuladores que han sido los principales causantes de la crisis, por lo que ellos serán el objetivo de nuestro primer ataque no violento. Se propone sacar en un solo movimiento bancario la cantidad de 155 € de tu cuenta corriente el día 30.El motivo de elegir esa cantidad concreta, es por ser una cifra apreciable y simbólica con la fuerza suficiente con la que demostrar a los bancos que estos movimientos son motivados desde la misma indignación que nos hizo movilizarnos el 15 de mayo.