“Porque no es justo … lucharé hasta el final por mi dignidad”
Wi Lilang, mujer que se resistió a ser desalojada forzosamente, sufriendo amenazas por ello.
El
15 de junio de 2011 la policía china de Wenchang retuvo durante 20
meses a un niño porque su madre se negó a firmar una orden de desalojo.
El mismo año,
Wang Cuiyan, anciana de 70 años del pueblo de Lichang,
fue enterrada viva por una excavadora cuando fueron a
demoler su casa.
Estos casos de desalojos forzosos con violencia no son una excepción en China.
Muchas personas son obligadas a abandonar sus casas mediante violencia y amenazas.
El gobierno chino asciende a los funcionarios locales que promueven el
crecimiento económico, pero lo hace sin tener en cuenta los métodos
utilizados para ello.
Estas desalojos, sin consulta ni protección judicial, están provocando verdaderos dramas humanos hasta el punto de que
41 personas, entre 2009 y 2011, se han prendido fuego para protestar contra la expulsión de sus casas.
Incluso el primer ministro de China, Wen Jiabao, ha reconocido la gravedad de estas situaciones. Sin embargo las
medidas gubernamentales tomadas han sido insuficientes, o directamente no han existido.
Ayúdanos a acabar con estas graves violaciones de los derechos humanos en China.
Firma aquí y
pídele a su embajador en España que paren los desalojos forzosos,
garanticen seguridad a estas personas y pongan a disposición de la
justicia a los responsables.
No mires hacia otro lado, muchas gracias.
Un saludo.
Esteban Beltrán
Director Amnistía Internacional – Sección Española (
@amnistiaespana)