miércoles, 28 de marzo de 2012

Lo que no se dice sobre Grecia (VICENÇ NAVARRO)

Artículo publicado por Vicenç Navarro, 28 de marzo de 2012

Este artículo señala las conexiones entre la banca alemana y el complejo militar del Estado griego, habiendo sido éste uno de los mayores responsables de la deuda griega, que el gobierno alemán quiere ver disminuida desmontando el escaso Estado del Bienestar de Grecia, sin apenas tocar el gasto militar. La supuesta ayuda a Grecia es básicamente para pagar a los bancos alemanes, entre otros, por las deudas contraídas en Grecia, en parte, por el sector militar.

Parece que, por fin, los dirigentes de la Eurozona (junto con el Fondo Monetario Internacional) han acordado un préstamo de 130.000 millones de euros al gobierno de Grecia para que ésta pueda pagar sus deudas. Es, pues, una transferencia de fondos a la banca europea, propietaria de la deuda pública griega, y muy en especial a la banca alemana, francesa y griega. A cambio, Grecia se convierte en una colonia de Alemania, pues cualquier decisión presupuestaria del gobierno griego tiene que se aprobada básicamente por el gobierno alemán Merkel. Las medidas impuestas por Alemania beneficiarán a la banca europea, incluyendo la banca y la gran patronal griega. La clase trabajadora perderá, según tales condiciones, gran número de los derechos, con enormes recortes en los servicios públicos del Estado del Bienestar, como sanidad y educación. En realidad, el dominio del establishment financiero y económico griego sobre el Estado griego durante, no sólo su periodo dictatorial, sino también su periodo democrático, es responsable del enorme retraso del Estado del Bienestar en Grecia. El fraude fiscal es enorme, como lo atestigua que el 94% de los griegos declaran ingresos inferiores a 30.000 euros al año. Según las cifras del fisco, Grecia apenas tiene ricos o súper ricos.
Dentro del establishment griego hay uno que está muy privilegiado por el Estado griego y que no ha sido afectado por las medidas de austeridad impuestas por Alemania. Es el complejo militar industrial. Grecia es el país europeo que proporcionalmente se gasta más en el sector militar. En realidad, es uno de los cinco países del mundo que importa más armas. Y la mayoría de estas armas se las venden a Grecia los siguientes países: Alemania, Francia y EEUU. Casi mil tanques Leopard fueron comprados en 2009 (ya en plena época de crisis) de su productor en Alemania. Y en 2010 también compró a Alemania 223 howitzers y un submarino al coste de 403 millones de euros. En realidad, Grecia se gasta más del doble del promedio que se gastan en armas los países de la OTAN. Parte de la deuda pública del Estado griego se originó precisamente con la compra de este equipamiento militar.
La supuesta ayuda de la Eurozona liderada por el binomio Sarkozy-Merkel, es precisamente una ayuda de los bancos alemanes y franceses, que prestaron dinero al Estado griego para que éste pudiera comprar armas y enriquecer el estamento militar más grande (proporcionalmente) de la UE-15. Para darse una idea del tamaño de este sector, basta conocer que Grecia tiene un ejército de 156.000 personas para ofrecer, en teoría, seguridad y defensa a once millones de ciudadanos. El Ejército alemán tiene 250.000 personas para una población aproximada de 82 millones de ciudadanos.
Pues bien, este sector es de los que menos recortes recibe en las políticas de recortes. Hasta hoy, y según las propuestas del binomio Merkel-Sarkozy, los servicios públicos del Estado del Bienestar, sanidad y educación, recibieron recortes muy sustanciales. No así sus fuerzas armadas. ¿Por qué un sector militar tan extenso? A primera vista podría creerse que, puesto que Grecia es el país del mundo con mayor marina mercante, una posible explicación sería para guardar tal marina, en tiempos de piratería, como los actuales. Pero la dimensión náutica de tales fuerzas armadas está poco desarrollada. ¿A qué se debe, pues, un gasto tan notable? Entonces, la opción restante es el “peligro de Turquía”. Pero parece que pocos esfuerzos se han hecho para diluir las tensiones con Turquía. Todos los indicadores parecerían indicar que los problemas con Turquía podrían resolverse por vía diplomática. Pero ello no ocurre. Y la causa es que no se desea que se resuelvan. La industrial armamentista, el Ejército y la banca alemana y francesa, no desean que las tensiones desaparezcan. Y de ahí la situación escandalosa (no hay otra manera de definirla) actual. El gobierno alemán está imponiendo unas medidas de austeridad brutales a las clases populares griegas a fin de que el Estado griego pueda pagar a los bancos alemanes los préstamos de dinero que el gobierno de Grecia tuvo que pedir para poder comprar sus juguetes militares. Así de claro.