miércoles, 14 de diciembre de 2011

GRABANDO (ISMAEL SERRANO)

Podría estallar la guerra, sobrevenir un apocalipsis zombi, nevar quizá, o podría ser que  las redes de un barco atunero atrapasen a una sirena en mitad de un mar embravecido, que a todo el planeta le diera por besarse en los portales, podría una mañana salir en la tele Merkel llorando conmovida con un Sarkozy radiante a su lado, diciéndole, no aguanto ni un minuto más sin decirte que te quiero, se abrazarían entre los aplausos de funcionarios y banqueros, buscándose los labios, los chóferes lanzarían las gorras a lo alto, los camareros vaciarían las copas de sus bandejas si miradas vigilantes, los policías buscarían en los ojos rebosantes de ternura de sus compañeros lágrimas de diamante, quizá también pensando, no aguanto ni un minuto más sin decirte que siempre te he querido. Podría ocurrir todo esto y yo no me enteraría hasta ya muy tarde, al llegar a casa. Saldría del estudio pensando en mis canciones, en los planes pendientes. Volvería a casa, ya digo, y quizá al encender el ordenador, mirar el televisor o quizá las 28 llamadas perdidas del teléfono caería en la cuenta de que el mundo está por derrumbarse. 

Es absorbente empezar a grabar un nuevo disco. Aún así estoy pendiente de ti. Cómo muchos, sigues buscando un trabajo, un lugar en el mundo desde el que gritar, como el que se asoma a un acantilado y le habla a las olas, ruidosas, plateadas. Quizá la suerte hoy te acompañe. Como en la película de Berlanga, esta navidad Plácido recorrerá Madrid buscando aplazar una deuda, y una estrella de bombillas marcará el camino a una boca de metro. No habrá agua para los camellos, ni anís para unos reyes perdidos por el desierto. Con todo y con eso, como te digo, sueño contigo. Saldremos de nuevo a la calle, ya verás, porque este invierno será frío y no hay lumbre más ardiente que la que ofrece tu piel vestida de mayo.
Salgo del estudio después de grabar algunas sesiones de batería para un nuevo disco. Y aunque uno llegue tarde al fin del mundo, aún rehén de un manojo de canciones, sigo pensando en ti.


Acuerdo de mínimos en Durban

La Cumbre del Clima de Durban finalizó a primeras horas del domingo 11 de diciembre con un acuerdo de mínimos que promete trabajar en el futuro para conseguir un nuevo protocolo internacional anti-emisiones y el establecimiento del Fondo Verde para el Clima, un presupuesto para ayudar a países en desarrollo o más vulnerables a adaptarse a las condiciones climáticas del futuro.

El nuevo tratado propuesto queda a medio camino entre la posición europea, que demandaba un acuerdo legalmente vinculante lo antes posible, y la de países como China, India o EEUU, que no estaban dispuestas a aceptar un tratado que frenara su crecimiento. Finalmente, los 195 países representados alcanzaron un acuerdo lo suficientemente ambiguo para contentar a todo el mundo.

Este acuerdo, según la Convención Marco para el Cambio Climático de Naciones Unidas (UNFCCC), debería comenzar a prepararse en 2013 y estar listo como muy tarde para 2015, coincidiendo con la 21º Cumbre del Clima. El nuevo protocolo podría comenzar a aplicarse en 2020.

Entre los actores participantes, hay una cierta discrepancia en cuanto al resultado de la cumbre:

Maite Nkoana-Mashabane, presidenta de la conferencia y Ministra surafricana de Relaciones Internacionales y Cooperación, cree que “hemos dado un paso adelante crucial para el bien común y la ciudadanía global”. Para la UNFCCC, los acuerdos de Durban suponen “un gran paso adelante en la respuesta de la comunidad internacional al cambio climático”. Christiana Figueres, secretaria ejecutiva de la organización, ha felicitado a los países “por dejar a un lado sus apreciados objetivos propios y llegar a un propósito común: una solución a largo plazo para el cambio climático”.

Por su parte, las organizaciones ecologistas presentes en Durban han lamentado la resolución de la cumbre como una oportunidad perdida. Para Aída Vila, de Greenpeace, la inclusión en el acuerdo de una cláusula “que no deja cerrada la forma legal del acuerdo” y la previsión de que éste no tendrá efecto hasta 2020, es algo negativo. En los mismos términos se ha expresado WWF  a través de la responsable de su programa de Cambio Climático, Mar Asunción: “No podemos seguir mirando hacia otro lado o aplazando la toma de decisiones indefinidamente. Ahora, por presiones de EEUU y un pocos países más, se ha aplazado el acuerdo global hasta 2020, como si el clima fuera a respetar sus agendas”. Otros grupos ecologistas, como la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN), sí han mostrado su satisfacción ante el acuerdo.

Después de defender su postura intensamente durante varios días, Connie Hedegaard, comisaria europea para cambio climático, se ha mostrado satisfecha con el resultado: “Con el acuerdo de una hoja de ruta para un nuevo marco legal en 2015 que involucrará a todos los países en la lucha contra el cambio climático, la Unión Europea ha conseguido su principal objetivo para Durban”. El entusiasmo de Hedegaard es compartido tanto por Martin Korolec,  Ministro de Medio Ambiente de Polonia (país que ahora ostenta la presidencia de la unión) como por Teresa Ribera, secretaria de Estado de Cambio Climático, que ya desde Madrid expresó su satisfacción por el acuerdo. (Fuente: SINC)

La indefinición y retraso para reducir CO2 encarecerán la lucha contra el calentamiento, según experto español del IPCC

El vicepresidente del Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC, por su siglas en inglés), José Manuel Moreno, ha alertado de que la indefinición en los acuerdos alcanzados en la Conferencia de Durban para conseguir un pacto global vinculante para reducir emisiones de gases de efecto invernadero encarecerá la lucha contra el calentamiento global.

Moreno se ha referido así, en declaraciones a Europa Press, a las conclusiones de la 17 Conferencia de las Partes sobre Cambio Climático de la ONU que ha acordado la implementación de un instrumento con fuerza legal que abarque a todos los países y que entraría en vigor en 2020. Del mismo modo, en Durban se ha pactado un segundo periodo de cumplimiento para el Protocolo de Kioto (desde 2013 hasta 2017 ó 2020), pero del que se descuelgan Canadá, Japón y Rusia.
   Por ello, el experto español ha destacado que todavía no hay una fecha concreta para la acción, ni tampoco se conoce cómo estos acuerdos van a lograr descender la emisión de sus gases de efecto invernadero, ante la falta de medidas concretas aprobadas.
   "Cuanto más tarde se reduzcan las emisiones, más gases habrá en la atmósfera y su efecto, por tanto, estará operando durante más tiempo. Cuanto más se tarde en empezar a reducir las emisiones, mayores serán los esfuerzos que habrá que hacer y por tanto, mayores las dificultades", ha avisado a los 192 gobiernos que han participado en Durban.
    Desde el IPCC, Moreno ha alertado de que al país sudafricano acudían los gobiernos para poner en marcha mecanismos que pudieran hacer que, como en la pasada cumbre de cambio climático en Cancún, el clima no se caliente por encima de los dos grados centígrados, previstos por el IPCC en su informe de 2007, si el calentamiento global sigue su curso.

NO HAY DÉFICIT CIENTÍFICO PARA TOMAR DECISIONES

   Moreno ha resaltado igualmente que la temperatura media de la Tierra es de 15 grados centígrados, al mismo tiempo que ha puntualizado que el Protocolo de Kioto, aprobado en 1997, establecía para 2012 una reducción del 5 por ciento de las emisiones.
   "El hecho de que no haya todavía un marco definido acerca de cuánto y cuándo se van a reducir las emisiones significa que van a seguir las emisiones a ritmos parecidos a los actuales, es decir, muy altos, y en el momento en el que se decida que habrá que reducirlos habrá que hacer unos esfuerzos muy grandes", ha insistido el profesor.
   Finalmente, ha criticado la actitud de algunos países que pedían datos del próximo V Informe del IPCC, que verá la luz en 2014 cuando, a su juicio, el último informe del organismo de 2007 aporta información "suficientemente concluyente" para que los países tomaran una decisión, además de dos trabajos del Panel de este año, uno sobre energías renovables y el otro sobre fenómenos meteorológicos extremos.

Canadá se retira del Protocolo de Kioto para no pagar multas en crisis

Canadá se retirará del Protocolo de Kioto contra el cambio climático, según ha confirmado el ministro de Medio Ambiente del país norteamericano, Peter Kent, quien ha admitido que, en época de crisis económica, no pueden permitirse pagar las multas que conlleva el incumplimiento en el recorte de las emisiones, de unos 14 millones de dólares canadienses (10,3 millones de euros).

Canadá se convertirá en el primer país que se desmarca 'a posteriori' de este tratado, que cuenta con las destacadas ausencias de Estados Unidos y China, principales emisores de dióxido de carbono del mundo.
   "Como hemos dicho, Kioto está en el pasado para Canadá", ha dicho Kent tras volver a su país desde la ciudad sudafricana de Durban, donde precisamente se acordó una prórroga de este protocolo. "Vamos a invocar nuestro derecho legal para retirarnos de Kioto", ha declarado, aunque sin confirmar fechas.
   El Gobierno canadiense, que teme fuertes multas en caso de seguir como parte firmante, mantiene que hace falta un tratado global para recortar la emisión de gases contaminantes a la atmósfera pero insiste en que tiene que cubrir a todos los países.
   El Protocolo de Kioto, firmado por el "incompetente Gobierno liberal", como ha calificado Kent a la anterior administración, obliga a este país a reducir para 2012 en un 6 por ciento sus emisiones de dióxido de carbono, tomando como referencia los datos de 1990. Sin embargo, en 2009, las emisiones habían crecido un 17 por ciento sobre los datos de hace dos décadas.