Después de la riquísima comida, nos decidimos a ir a visitar Montblanc, que tanto nos han recomendado ... ¡no nos decepcionó! precioso pueblo medieval amurallado, con la preciosa Iglesia de Santa María La Mayor (conocida como la Catedral de la Montaña), por el que da gusto pasear y perderse por sus calles, ¡nos encantó!.
Anina.
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