Mathias (Kevin Kline), un neoyorkino que necesita dinero, viaja a París
para vender el lujoso apartamento que acaba de heredar de su padre, con
quien no tenía ningún contacto. Al llegar allí descubre que una señora
mayor, Mathilde, vive allí con su hija. No tarda en enterarse de que,
según la ley francesa, no podrá hacerse con el piso hasta que Mathilde
fallezca. (FILMAFFINITY)
CRÍTICAS:
"Extraordinaria película (...) Kevin Kline da
toda una lección magistral (...) parece una película ligera, pero, tras
su inicial levedad, se oculta un discurso sabio, complejo y doloroso."
Jordi Costa: Diario El País
"Empieza como una simpática comedia, ligera y
vacua, pero poco a poco se empieza a deslizar por las rendijas una
atmósfera turbia, cada vez más espesa y dramática, que va envolviendo a
la película. (...)"
José Manuel Cuéllar: Diario ABC
"La fluidez narrativa no es el principal mérito
de este tardío debut que, por momentos, huele a naftalina. (...) Los
tres protagonistas resultan convincentes (...)"
Alberto Bermejo: Diario El Mundo
"Una comedia adulta capaz de tapar la boca de
quien afirme que en las salas oscuras ya sólo hay sitio para fruslerías
ruidosas (...)"
Antonio Trashorras: Fotogramas
"Una refrescante y tierna comedia acerca del
amor extramarital, de la herencia y de su descendencia (...)"
Sergio F. Pinilla: Cinemanía
Ayer fuimos Juanma y yo al cine Van Gogh, aprovechando que era el día del espectador, para ver esta película que a mi me parecía que tenía muy buena pinta, aunque Juanma me dijo que en "días de cine" no la habían puesto muy bien.
A mi si que me gustó, los 3 actores me encantan. A Juanma no le ha gustado mucho la historia.
Anina.
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